Hola, ¿podría valorar si esta cubierta se puede realizar mediante embutición profunda?
Un mensaje de un cliente llegó a nuestro buzón con un dibujo en 3D adjunto, que llamó inmediatamente la atención de nuestro equipo.
Tras una hora de minuciosa revisión, respondimos con una pregunta rápida: "¿Por casualidad tiene alguna muestra similar que podamos utilizar como referencia?".
Su respuesta no tardó en llegar: "Lo sentimos, se trata de un nuevo diseño, no tenemos muestras, datos o experiencia anteriores que compartir con usted".
Tras una intensa sesión de brainstorming con el equipo, en la que las ideas volaron de un lado a otro, tecleamos nuestra respuesta con determinación: "¡No hay problema, vamos a intentarlo! Estamos ansiosos por aceptar este reto y potenciar nuestras capacidades de desarrollo en el proceso".
"Estupendo, ¡esperaremos buenas noticias!", respondió el cliente. "Pero para estar seguros, también lo comprobaremos con nuestros otros fabricantes, lo sentimos, pero no podemos poner todos los huevos en la misma cesta".
"Entendido, lo comprendemos perfectamente. Haremos todo lo posible", les aseguramos.
Como suele decirse, el camino hacia el éxito está empedrado de pequeños pasos firmes y mejoras constantes de los procesos.
Cuatro semanas después, cuando presentamos las muestras acabadas, los ojos del cliente se iluminaron de emoción. "Muchas gracias por vuestro apoyo. ¿Cómo demonios lo habéis conseguido?".
"Utilizamos soldadura láser, que nos proporcionó unas líneas de soldadura superlisas sin apenas salientes", explicamos con orgullo. "Luego prensamos la chapa con nuestros procesos maduros de eficacia probada, después la enrollamos en tubo y fabricamos una plantilla de fijación especial específicamente para el paso de la soldadura láser para asegurarnos de que todo salía perfecto".